El cóctail llamado delincuencia, es la mezcla de varios elementos que detonan cuando se combinan con la incultura:
Los culitos que muestra don Tinelli: Le hace pensar a las adolescentes que tienen pulpa redondita, que la vida es mucho más linda y fácil, mostrando y dejándose tocar dicha pulpa.
La opulencia y ostentación descarada de las clases altas: Que marca los triunfos estúpidos de sus carreras internas por ocupar ese podio odioso de las marcas y el poder.
La lucha calle versus familia: En la casa todo es prohibición, reglas, horarios, obligaciones, orden y en la calle todo es joda, ilegal, droga, chupi, trasnochada, romper las reglas...
Los gobiernos corruptos: Que muestran sin pudor sus negociados, coimas, costos políticos, su gula miserable y su fiesta impúdica permanente...
El descontrol en la venta de alcohol: La cerveza y el fernet, son de venta libre...Los menores toman lo que quieren y fuman paco, marihuana, consumen pastillas en las fiestas electrónicas y nadie hace nada...
La difusión de la violencia como descarga: En los partidos de futbol y recitales de rock...
Las exigencias con respecto al cuerpo y la vestimenta: La cultura cero calorías, que mantiene a la gente bajo presión permanente, sintiéndose culpable y frustrada...
la caida del sistema educativo: El nivel bajo de los educadores y la poca importancia que tiene en la gente la escuela...
Podemos seguir enumerando muchos elementos más pero creo que con estos, ya podemos tener una idea de porque un adolescente drogado nos puede apuntar con un revolver comprado en el mercado negro.
Porque rompen nuestras ventanas en la noche y nos roban nuestras cosas ganadas con trabajo.
En definitiva porque nos violan constantemente...
Cuanto valen nuestros derechos humanos frente a los derechos humanos de los delincuentes que están protegidos, por ejemplo, por el pacto de San José de Costa Rica...